Manolo Dávila Pader

- Te ganaste a pulso el sobrenombre de “El amigo del pueblo” porque siempre diste lo mejor de ti para apoyar y ayudar a aquel buen compadre, aquel buen vecino, aquel buen amigo e incluso a aquel desconocido que con un buen gesto...

¡Don Chuy Pader, el amigo del pueblo!

Abuelo,

Hoy dejo postrado en este texto lo infinitamente agradecido que estoy con Dios al haber coincidido en esta vida contigo, Dios puso lo mejor de él en ti para que pudieras replicarlo en la tierra y lo cumpliste. Te doy gracias por tantos momentos juntos, tantas enseñanzas, tantos consejos, tanto cariño y amor, pero sobre todo: ¡Gracias por haber sembrado en mi la semilla de la felicidad!

En todo momento reflejaste un enorme esplendor al saludar con amor y una enorme sonrisa a tu familia, un buen abrazo a tus amigos y un buen apretón de manos a quienes sin saber ya se estaban convirtiendo en amigos de Chuy Pader. Te ganaste a pulso el sobrenombre de “El amigo del pueblo” porque siempre diste lo mejor de ti para apoyar y ayudar a aquel buen compadre, aquel buen vecino, aquel buen amigo e incluso a aquel desconocido que con un buen gesto, consejo o una sonrisa hacías que se contagiara de tu buena vibra y energía.

Estoy completamente seguro que todo aquel que te conoció está agradecido por haber coincidido contigo en la vida porque esos momentos los hiciste que fueran inolvidables. ¡Infinitamente agradecido por haberme querido tanto, enseñado y aconsejado tanto! Me quedo con esa imagen de ti, mi querido viejo abrazándome con una gran sonrisa y siempre diciéndome: – “Qué plan hacemos hoy Manoleiro?”–. ¡Gracias por tantas aventuras juntos pero créeme que algún día volveremos a vernos para seguir con mil aventuras más!

“De pie y de frente como pide la gente.”

“¡Viva Chuy Pader!”

Siempre en mi corazón abuelo.